José Hernández Navarro, escultor imaginero.
Sobre su formación e influencias...
Afirma: Cualquier escultor que nazca en Murcia pone sus ojos en Salzillo, primero por la grandeza que tiene como escultor, pudiéndolo calificar casi como el mejor de su tiempo, y segundo por la cercanía de esta pedanía, Los Ramos y Alquerías, con la capital Murcia.
Se considera un escultor autodidacta, visitó durante su periodo inicial de formación algunos talleres y además fue a la Escuela de Artes y Oficios para aprender a dibujar, disciplina que considera fundamental para la escultura. Su profesor de dibujo fue Joaquín Val, un gran artista, que se interesó mucho por él y por ayudarle en su formación.
De los talleres que más visitó fueron los de Sánchez Lozano, al que incluimos dentro del mundo de la imagineria y de la escultura neobarroca; y también al taller de Elisa Séiquer, escultora afamada de la tendencia moderna o vanguardista.
Irá bebiendo de fuentes de un sitio y otro. Llegará el momento en que se plantee, para poder evolucionar, que Salzillo ni había existido ni lo había conocido. Fue ese el justo momento de quitarse de encima esa lacra que condiciona a todo lo inicias, y poner “freno” de alguna manera a los encargos que buscan únicamente copias. Afirma: No ha sido fácil, y en Murcia menos, por que Salzillo ha representado la gloria de la Semana Santa y la gloria de las cofradías.
José Hernández Navarro como escultor...
Llego el momento de imponerme como José Hernández Navarro, malo, regular, bueno o como fuere, pero yo mismo, e intentar crear obra y aportar algo nuevo al arte dentro del ámbito en el que me desenvuelvo, la imagineria.
Poco a poco fue evolucionando, ya que se dio cuenta que en el momento en que se abandonan los viejos moldes surgen ideas nuevas. De este modo irá tomándose libertades, y alguna licencia que otra para hacer interpretaciones distintas a las acostumbradas tiempo a tras, trazándose así un camino propio. Siempre teniendo en cuenta que en el mundo de la escultura religiosa, hay que tener RESPETO, y esto es fundamental ya que sin él se pueden herir sensibilidades porque se trata de una escultura destinada a la veneración y, como bien afirma el propio escultor: en la obra religiosa, a la hora de crear hay que tener en cuenta el publico, al que va dirigida la pieza, y para lo que va a destinarse la obra. Por eso he buscado crear y ser original, intentando aportar un camino distinto, pero no he podido nunca olvidar que se trata de imágenes religiosas.
En la trayectoria de sus obras se nota una evolución: en un principio todas se acercan a la escuela murciana, dícese, Salzillo, Sánchez Lozano, etc. Pero llega un momento, en que comienza a despegar y desligarse de estas influencias. Según José Hernandez Navarro: en este momento me encontré con personas que no querían “eso”, si no que querían que me mantuviese haciendo obras que se parecieran a Salzillo y su escuela. Pero te tienes que poner en tu sitio, y aunque sin dar de lado todos los trabajos que me llegaban, me impuse y hoy día, gracias a Dios, la gente que me encarga una obra sabe que yo no voy a realizar una copia de Salzillo o que se parezca a tal obra de tal escultor.
Sobre los encargos: modo de trabajo...
Lo primero que realiza es un boceto a dibujo, que es el que da rienda suelta a la inspiración, a la primera idea, y después sobre este va creando toda la talla. Del boceto de lápiz, se pasa cuando se firma el contrato y se formaliza el encargo, a la maqueta, y esta es la que se lleva la cofradía y en ocasiones es expuesta allí. Después de todo el proceso, la maqueta vuelve al taller, ya que estás son de su propiedad: es lo único que me queda de cada obra.
Sobre los encargos: modo de trabajo...
Lo primero que realiza es un boceto a dibujo, que es el que da rienda suelta a la inspiración, a la primera idea, y después sobre este va creando toda la talla. Del boceto de lápiz, se pasa cuando se firma el contrato y se formaliza el encargo, a la maqueta, y esta es la que se lleva la cofradía y en ocasiones es expuesta allí. Después de todo el proceso, la maqueta vuelve al taller, ya que estás son de su propiedad: es lo único que me queda de cada obra.
Esta maqueta la pasa a tamaño natural, en un primer momento en plastilina, creando la composición de la nada. En este proceso se ayuda de esqueletos de hierro, alambrada, etc. Y sobre ellos, se extiende la plastilina, creando la obra a tamaño natural. Una vez en plastilina más o menos terminada, es cuando inicia el proceso de “sacar los puntos” realizando una cuadricula, que sirve para pasar de una forma “mecánica”, la maqueta en plastilina a la madera. Este sistema se utiliza sobretodo para que le puedan ayudar, por tanto, este proceso no es absolutamente necesario y un escultor puede directamente realizar su obra en la madera.
Una vez desbastada la madera llega la creación de todos los detalles, proceso que realiza siempre él. Afirma que: me gusta que mis ayudantes dejen un par de centímetros el contorno de la obra de toda la pieza para poder quitarlo, más vale que sobre madera que no que falte. En este proceso casi siempre improviso, para no realizar una copia exacta del modelo. ¡No me gusta copiarme ni a mi mismo!, es el momento en donde mi imaginación vuelve a crear y donde más disfruto en el proceso creativo.
Escultura y policromía…
Realiza la talla y la policromía, aunque esta ultima no le agrada demasiado, para él es la parte más desagradable de su oficio. Lo realizo por que es una exigencia de la propia naturaleza de la imaginería, pero para mí la imagen más bella es la que queda en madera. Quizás por este motivo, se plantea el propio escultor, que a lo mejor el mejor camino a elegir, no hubiese sido el ser un escultor de imaginería si no haber seguido un camino diferente. Reflexiona que: quizás sea por eso que mis imágenes son muy sencillas y no llevan grandes decoraciones. Porque para mí la escultura por excelencia es monocroma.
Restauraciones...
Las imágenes que más sufren daños son las imágenes de vestir, ya que son mucho más manipuladas que una de talla. Y dentro de las de talla completa, las que más sufren son las que se veneran en altares y tienen que ser trasladadas a los tronos y luego volverlas a bajar, etc. Por tanto con el tiempo tienen que volver al taller para realizarles una restauración, en la que se arreglan fisuras y daños superficiales que han podido sufrir.
Escultura y policromía…
Realiza la talla y la policromía, aunque esta ultima no le agrada demasiado, para él es la parte más desagradable de su oficio. Lo realizo por que es una exigencia de la propia naturaleza de la imaginería, pero para mí la imagen más bella es la que queda en madera. Quizás por este motivo, se plantea el propio escultor, que a lo mejor el mejor camino a elegir, no hubiese sido el ser un escultor de imaginería si no haber seguido un camino diferente. Reflexiona que: quizás sea por eso que mis imágenes son muy sencillas y no llevan grandes decoraciones. Porque para mí la escultura por excelencia es monocroma.
Restauraciones...
Las imágenes que más sufren daños son las imágenes de vestir, ya que son mucho más manipuladas que una de talla. Y dentro de las de talla completa, las que más sufren son las que se veneran en altares y tienen que ser trasladadas a los tronos y luego volverlas a bajar, etc. Por tanto con el tiempo tienen que volver al taller para realizarles una restauración, en la que se arreglan fisuras y daños superficiales que han podido sufrir.
La Obra: Cristo de la Oración en el Huerto – Paso Blanco, Lorca…
El estandarte de la Oración en el Huerto, que es para mí el mejor estandarte de la ciudad, tiene una grandísima importancia en Lorca y en el Paso Blanco. Su temprana fecha, ya lo hace un referente.
Pero aunque tuve que someterme a él, se ve que es obra mía y que no es una mera copia del estandarte, hay improvisación, pero no tuve más remedio que tenerlo en claro reflejo. Por ello el estandarte tuvo que ver bastante en la configuración de la escultura.
Su puesta en escena en la procesión blanca:
La imagen, durante la procesión, tiene una ambientación preciosa con las rocas, el olivo y el adorno floral, que es reflejo de la joya del estandarte que intenta dar vida.
Muy buena entrevista, gracias por este artículo.
ResponderEliminarMuchas gracias por tú comentario, nos alegra que te haya gustado esta entrada. Actualmente estamos trabajando para conseguir más entrevistas.
ResponderEliminarUn Saludo y gracias por leernos ;)
Porque no poneis una imagen del tan mencionado "el mejor estardante de Lorca"!! an y otra cosa yo creo que el señor escultor que ahora mismo no recuerdo su nombre, para esculpir las manos estoy segurísimo que no se fijo en dicho estardante =)
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